Hace unos años nunca se me había ocurrido la idea de sentirme joven, nunca había planeado salir a caminar. Si caminaba era porque las circunstancias me obligaban a bajar el ritmo. Como tantos otros talentos, a ser joven uno no aprende de viejo. Fuiste.

–Por suerte solo llego a morder su cachete. Dijo uno de los oficiales a su superior. Crunch! –Arenosa. Ptu! Crunch! –Muy dura. Ptu! Cjjjjjrunch! –Terriblemente transgénica. Ptu! Escupió Ana.

Antesala 12 August 2010 at 14:24 En una prision sin rejas se encierra, le gusta sentir el oxido impalpable en sus manos fatigadas. una imagen eterna lo desvela, necesita luz para llegar a lugares oscuros y ruido para alcanzar el silencio.

En cada reunión siempre andamos preguntando de donde somos y a dónde vivimos aquí en BC, por lo que decidimos preguntarlo masivamente.

Hace unos días que el trabajo no me permite actualizar el diario. Pero este día no me resulta uno más, y por eso van mis mejores deseos para todas ellas.

El niño mimado y el maltratado

El 25 de marzo, pasate a comer un choripan del Máquina con chimichurri. Si tu estómago es delicado, el vacío a la parrilla es siempre mejor que a un compatriota, y mucho mejor si se acompaña con amigos y un numerito folclórico.

Lo que sigue es el relato de mi estado mental de un día cualquiera del comienzo de mi segundo año de inmigrante. La foto, es de Sofía, la hija de Marta Ram. La dulzura de su expresión lo dice todo. Ver a un niño feliz, nos hace felices.

Casi todos nos hemos reído con este genial relato de Dady Brieva, pero siempre lo podemos disfrutar una vez más....

Continuo con mi relato de las experiencias de inmigrante en mi primer año en Canadá.