Con la espontaneidad que la caracteriza, Andrea Natalia nos relata en primera persona sus sentimientos en una época de baja autoestima en que a veces las mujeres se sienten un buen vientre como máximo. Atención primerizas, a no bajar los brazos!
Recuerdo mi primer embarazo, hablado, buscado y calculado matemáticamente porque no quería llegar en pleno verano con un calor de 45 grados (en mi ciudad) y yo con una panza enorme de 8 meses que ni pudiera moverme... todo fríamente calculado y con todas las precauciones tomadas, pero hubo algo que no calcule... la depresión post parto. Nunca pensé que me iba a pasar, no importara todo lo que había leído, siempre pensé que el tema de “las hormonas” era una excusa y que solo le pasaba a las mujeres débiles (lindo pensamiento el de la doctora!!!)... y yo me creía la mujer maravilla!!! y como quien no quiere la cosa... PUM!!! Yo estaba con depresión post parto y no me había dado cuenta!!!...
Durante el embarazo, todo es muy felíz, todo el mundo está muy contento y todo el mundo te dice siempre la misma pelotudez: Que felicidad!!!, es lo más lindo del mundo!!! Ser madre es lo más preciado y hermoso!!! Van a estar muy felices!!!... Te va a encantar darle la teta a tu hijo!!! Es lo mas hermoso del mundo!!!; cuando ví a mi bebé automáticamente me enamoré... y bla bla bla... Esas palabras, aunque sean lindas, creo que no ayudan en lo absoluto porque una se hace ilusiones de que le espera el paraíso con la llegada de un nuevo integrante... Solo una chica fue valiente y me dijo algo muy sabio que me ayudó enormemente y en su momento me chocó un poco: - "Desde que llegas a tu casa, los primeros 15 dias, van a ser los peores de tu vida, pero quédate tranquila que pasan... después no es lo mismo"... y lo entendí de la peor forma: Tu vida tranquila y perfectamente planeada cambia, el bebé no es un mueble, leer algo no es tan simple, lavar tres platos te toma dos horas, ver una película es una odisea e ir al baño tranquila es solo un recuerdo lejano. Dar la teta está muy lejos de ser algo placentero y lo único que viene a tu mente es como es posible que un Gremilin sea mamífero, si su forma de reproducción es cuando Gizmo se moja??? y Ahí es cuando aparecía la Mini My diabólica en mi hombro izquierdo y me decía: - que hiciste? No sos mujer! pasaste a la categoría de vaca! en cualquier momento te convertís en hamburguesa!; todos los que te dijeron que ser madre es la mejor experiencia de tu vida, te lo dijeron porque te odian! Esta Mini My, me mostraba una foto de una madre amamantando con cara de felicidad y decía: - ESA FOTO ESTA TRUCADA!!! Le pagan para que sonría!!! Eso es imposible!!! Es plagio!!! Maldita sociedad que te hacen creer que uno tiene que sentir lo mismo y que sentir de esta forma esta mal!!!... y con ese tipo de pensamientos 24 hs al dia, estas a segundos de fundar el primer movimiento de la revolución anti ser padres del mundo!!! pero en esos momentos, aparecía en mi hombro derecho la Mini My buena y repetía: - Son solo 15 dias!!!... y se iba... sin decir una sola palabra más...
Lo cierto es que para padres primerizos es algo más común de lo que uno piensa, pero es tema tabú y está mal decirlo, así que cuidadosamente planeas un PLAN A tratando de sacar el tema diciendo: -" hablando de felicidad que tanto dicen, que onda??? es cierto que va a llegar o ya la cagué??? (siempre chequeando la cara del receptor mientras vas hablando y deacuerdo a la reacción ir cambiando el discurso).... De hecho, si llegas a asomar mínimamente la idea o media palabra al respecto y te miran con cara de que si seguís hablando te queman en la hoguera o llaman al cura mas caro para exorcizarte y sacarte al diablo de adentro, o la opción mas simple, barata, aceptada socialmente y posible: llamar a un psiquiatra amigo!... cambiá el tema de conversación inmediatamente!!!
También hay que estar atenta a la "cara de poker" con la famosa frase: - "Yo NUNCA pensé eso y SIEMPRE fui muy feliz desde el inicio con mis veinte hijos!!!"... esas son personas que responden a un mandato social y no a una vivencia u opinión propia.
Nunca tenés que dejar de intentarlo y cuando el plan A no funciona, siempre es bueno poner en marcha el plan B, pateando la pelota afuera, con la típica: - Después del bebé, mi marido cambió un montón y no me ayuda en nada! No es el chico que conocí!. Después de haber dicho eso te sentís Einstein y esperas a que del otro lado te digan: - POBRECITA VOS!!! Hay que putear a tu marido!!!, pero pasa todo lo contrario, obtenés una respuesta muy natural: - AHHH!!! No te preocupes! SON TODOS IGUALES!!! Tenes que aguantar solamente y callarte la boca!... Y en esos momentos es cuando aflora tu mitad de sangre italiana, y te convertís en Al Capone: - Para que carajo me preguntas que me pasa si me vas a decir una pelotudez, decime lo que quiero escuchar y listo!!! No es tan difícil!!!. Como resultado: no te sentís mujer, esposa, ama de casa, madre, amiga, profesional, útil... pero si te sentís como: una Vaca, una teta (y si todavía te queda algo de autoestima, como dos tetas!), y una inútil total. Ahí es cuando te das cuenta que estás pasando por una depresión post parto.
Solo cuando te das cuenta de eso, podes cambiar la situación... y ahí te das cuenta que los peores 15 días de tu vida ya pasaron... y sin querer... Esa situación afortunadamente no pasa con el segundo y aparece en el nuevo camino por transitar (y posible próximo artículo) ella, mi nuevo gremilin: Anastassia, que nació de 41 semanas (esa parte juro que no es divertida!!!) y 3,740 kg, nacida un 24 de abril de 2018!
COMENTARIOS
No han dejado comentarios
Escriba su comentario